Últimos días de color y alegría en Hetauda

Los días de celebraciones del Tihar continúan y también las actividades que realizamos con los niños y niñas.

El miércoles, en el segundo día del Tihar, las agraciadas de este día serían las vacas, símbolo de la fertilidad. Para venerarlas se les pinta el tika en la frente y con una mezcla de barro y excrementos que simboliza la fertilidad de la mujer y la tierra, se pinta un círculo en la entrada de las casas, sobre el cual se pintarán mandalas y rangolis con polvo de arroz y colores. Un camino hecho con la misma mezcla desde el círculo al interior de las casas, que por la noche se iluminará con velas de aceite, invita a la buena suerte a iluminar la vida de la gente.

Esa misma noche comienza la fiesta esperada, el «Deusi bailo», en el que se visitan las casas por la noche para bailarles a los vecinos y obtener un aginaldo como señal de que la diosa de la riqueza ha llegado. Para que todo salga genial, los chicos y chicas estuvieron ensayando toda la mañana y preparando las flores para el último día de celebración. Aún así, sacamos algo de tiempo para hacer algún juego de imitación, en el que, como siempre, «nuestros peques» se mostraron muy participativos.

A pesar de las fiestas, también las tareas rutinarias se dan lugar. En este caso, uno de los niños de la casa, corta «besar», unas raíces utilizadas para cocinar.

En la casa, las «mamis» cocinan un postre típico de estas fechas, selroti, una especie de churro que luego usarán también como ofrendas.

¡Y llegó la hora de demostrar lo practicado durante días…! A nosotras también nos tocó poner en práctica lo aprendido… ¡y parece que a los vecinos les gustó!

Llegamos al cuarto día de festejos. Los bueys son los protagonistas, ya que se usan para muchas tareas agrícolas en este país, como en el cultivo de arroz, así como también el estiércol de vaca, que se venera este mismo día.

Realizamos una actividad en la que tendrían que poner a prueba cuatro de los cinco sentidos que tenemos… ¡y la verdad es que los tienen muy bien desarrollados!

Por la noche continuamos con más actuaciones en las que los niños y niñas lo dan todo. Es emocionante ver como show tras show siguen mostrando la misma sonrisa que la primera vez, carretando con el altavoz a hombros de casa en casa.

Con una mezcla de alegría y tristeza al mismo tiempo, llega el último día del Tihar. Alegría porque es un día esperado con ansia, y tristeza porque coincide con nuestro último día aquí….

En este día, que se dedica a los seres humanos, se practica un ritual en el que se demuestra amor entre «hermanos» y «hermanas». Las chicas desean prosperidad a los chicos y los chicos muestran protección a las chicas. Sentados en círculo por orden de edad primero los chicos, y tras la apertura de la ceremonia pintando una tika de colores y rompiendo unas nueces en la entrada de la casa, las chicas rociarán flores, tika (mezcla de arroz, polvo de arroz y colorante rojo), y aceite alrededor de los chicos y después pintarán una tika de colores en sus frentes y colocarán un collar de flores de «makhmali», unas flores lilas que simbolizan larga vida ya que no se marchitan. Para finalizar le harán una ofrenda de dulces, fruta y frutos secos, «Bhai masala». Después le tocará el turno a las chicas, que además de ser pintadas y entregar un plato con las mismas ofrendas, recibirán dinero.

Último día de bailes y cantos… pero no por ello menos importante o aburrido. Siguen con la misma energía, incluso más porque es el último día.

Al finalizar, también llegó la hora de nuestra despedida…Nos da pena dejar una familia tan encantadora y predispuesta para todo, nos hubiera gustado realizar más actividades o simplemente pasar más rato de conversaciones y juegos con ellas… pero el tiempo pasa y la vida continúa… como continuará para ellas que en dos días empezarán las clases de nuevo…A Gonzalo, Bárbara y Noemí aún les queda unos días junto a ellas que estamos seguras seguirán aprovechando con la Familia de Hetauda.

¡Muchas gracias Camina Nepal, por dejarnos compartir esta experiencia con vosotras!

Festejando con l@s niñ@s

Ya pasaron 3 días más en Hetauda, todo vuela aquí: pompas de jabón, cometas y luces de colores.

Hoy llegó el Tihar, una celebración en la que todo el país se vuelca alumbrando las casas con muchas lucecitas y festejando por medio de diversas tradiciones.

Hoy tocó el día del perro: desde la mañana nos encontramos a todos los cánidos con collares de flores y la frente pintada. Le dedican este primer día por ofrecer protección a las casas, a última hora nos encontramos algunos de ellos tumbados con la barriga bien grande y un plato de arroz delante sin tocar.

Gonzalo trajo una bola de luces para que alucinaran l@s niñ@s:

Intentamos hacer que l@s pequeñ@s disfruten al máximo cuando preparamos una actividad y la verdad es que nuestro esfuerzo se ve recomensado con creces por ell@s. Su motivación con todo lo que les proponemos no deja de sorprendernos.

Hemos hecho varias construcciones, como cocodrilos con limpiapipas y aviones con palitos. Estas actividades consiguen desarrollar su creatividad y son unos estupendos juguetes con los que imaginar y divertirse:

Además preparamos la mezcla mágica para hacer pompas de todos los tamaños:

Hoy, 6 de noviembre es el cumpleaños de Elba, así que, después de comer, nos hemos ido a comprar una tarta para celebrarlo como se merece. Nos encontramos con las calles de Hetauda muy bulliciosas debido a estos días de festejos:

Además de la tarta, aprovechamos para pasarnos por una tienda de muebles y comprar tres armarios para las habitaciones de las niñas mayores que ya los necesitaban. Como siempre, Gonzalo saca su ingenio para regatear, esta vez con un truco de magia:

El afilador también salió a la calle a hacer su trabajo.

Esta tarde ha sido muy divertida, les enseñamos a hacer globoflexia y Elba puso en marcha sus pinceles para hacer un pintacaras genial.

Más tarde soplamos las velas, o mejor dicho, el cohete y nos sorprendieron con dos bailes que prepararon en secreto como regalo para Elba. Acabamos el día haciendo varios juegos musicales y ¡bailando la macarena! 😀

¡Parabéns Elba!

¡Intercambiando ciencia y cultura rural nepalí!

Otro día más en Hetauda y la ilusión compartida no para de crecer.

El viernes desarrollamos nuestra creatividad y memoria creando varios juegos de «Memory». Tuvo una acogida estupenda entre pequeños y mayores, ¡y los próximos días quieren aumentar el número de piezas para que sea más difícil! 🙂

Por la noche, llegó la visita de 3 componentes de Aba Nepal, (Aurora, Carlos, Silvia) e Isa de Help Nepal, ONG amiga que trabaja en Sifol, una Casa de Acogida de Kathmandú, y que junto con Camina Nepal colaboran becando estudiantes universitarios.

El sábado….

….en cuatro estaciones realizamos diferentes experimentos científicos caseros, como comprobar la tensión superficial del agua con un clip, las diferentes densidades creando una lámpara de lava, hinchar globos con una mezcla «mágica» y comiendo lacasitos después de ver cómo su colorante sólido se transforma en un arco iris líquido.

Entre tanto, sus actividades cotidianas siguen su curso y nosotras nos involucramos siempre que podemos…. colaboran con las tareas principales del hogar como lavar la ropa o hacer «roti» (pan típico nepalí), nos enseñan sus lugares preferidos de la casa y sus juegos típicos (Carrom), nos hacen peinados…

Para finalizar el día, después de gastar toda la energía en el campo por la tarde con juegos deportivos, realizamos «El Show de los Enanitos», en el que disfrutamos riéndonos con la expresividad de Zalo y Pedro, y la gestualidad de manos de Bárbara y Carlos.

Mañana por la mañana nos despediremos de las compañeras de Aba Nepal y Help Nepal, que pondrán rumbo de nuevo a Kathmandú para proseguir con su proyecto creativo en Sifol. Gracias por vuestra visita y colaboración en las actividades! 🙂

Experimentando y malabareando

Después de dos días de hospitales, comenzamos una programación en la que vamos intercalando diversos experimentos científicos con otras actividades, generalmente artísticas.

Empezamos bailando desde primera hora de la mañana, unos cuantos estiramientos y mucho ritmo para empezar el día con energía

Ayer tocó jugar con la ciencia, hicimos estallar el volcán todos/as juntos/as, mezclando vinagre, bicarbonato y colorante.

Mientras nosotros/as nos dedicamos a las actividades más lúdicas, las mamis de la casa dedican sus esfuerzos a aventar, es decir, separar el polvo y la vaina de los garbanzos, para después freírlos y poder disfrutarlos a la hora de comer.

Hoy nos convertimos en malabaristas, creamos bolas y cariocas con arena, globos, tela, cuerdas y lana. Luego practicamos durante un buen rato con nuestros nuevos juguetes.

Los/as más pequeñitos/as hicieron una casita de colores con pintura de dedos, estos dibujos nos servirán como telón de fondo para una nueva canción que cantaremos estos días: «I have a little house that it’s like this, like this…»

Zalo, Bárbara y Noemí trajeron grandes maletas cargadas de ropa y cepillos de dientes desde España, los cuales provienen de mucha gente solidaria que ha querido colaborar con Camina Nepal. Esta tarde todo esto ha llegado a los/ niños y niñas. Nos pasamos un buen rato repartiendo sudaderas, chándal, ropa interior… los cuales han sido recibidos con muchísima ilusión.

En Nepal se cena a las 19:00 y antes de las 21:00 ya están nuestros/as pequeños/as durmiendo. Aún así, encontramos un ratito para jugar con los/as mayores a «el pueblo duerme», practicando inglés y divirtiéndonos al mismo tiempo.

¡Namasté!

Entre Hospitales y juegos

Llevamos 2 días de excursiones mañaneras para llevar a cabo difrentes revisiones: oculista, dentista y dermatólogo.

La ONG Camina Nepal sufraga estos gastos para cuidar la salud de los/as pequeños/as. Nos llevamos a todos los niños y niñas de la casa de acogida y regateamos con varios motocarros en los que vamos hasta 10 pasajeros en un mismo remolque.

Los hospitales son muy diferentes aquí, especialmente el dentista, donde todo el mundo puede ver como te empastan una muela, ¡mientras el señor odontólogo te alumbra con la linterna del móvil!

Seguimos descubriendo secretos de la cocina nepalí como el Iskush, una verdura muy sabrosa de la familia de la calabaza (Cucurbitaceae).

La más sabia de la casa a la que llamamos Ama es nuestra cocinera más entrañable, aunque no habla inglés sus ojos expresan más que cualquier idioma.

Ayer por la tarde llegó una profesora de yoga a la casa para hacer un rato de meditación con los/as niños/as y alguno no tan niño que también se animó.

Esta tarde comenzamos a enseñarles algunas coreos y nos impresionaron con la energía y la soltura con la que se mueven estos chiquillos.

Después de activarnos con los bailes, estrenamos el primer taller de esta temporada. Construímos unas indiacas con globos, esponjas y ramas de escobas, luego nos pasamos casi toda la tarde jugando con ellas y otros juegos en el playground al lado de la casa.

Mañana empezaremos con experimentos científicos muy curiosos.

¡Subha ratri!

¡Buenas noches!

PD: El gobierno nepalí no permite la difusión en las redes sociales de la cara de los/as niños\as que pertenezcan a casas de acogida. Por eso las omitimos.

Periplo hasta Hetauda y día 1 con los niños y niñas de la casa de acogida

¡Nos vamos en el Jeep a Hetauda!

Despedimos a los amigos de Creative Nepal y Aba Nepal en la puerta de la casa.

Llega nuestro Jeep un poco tarde y se pasa 20 minutos arreglando la dirección antes de salir. Cargamos nuestro equipaje y emprendemos la ruta por las montañas, entendiendo la necesidad de un 4X4 para realizar el viaje.

A mitad de camino se estropea la dirección de nuevo y, entre regular el tráfico y trucos de magia de Zalo, nos pasamos media hora al lado de un chiringuito de carretera.

La distancia entreKathmandú y Hetauda es tan sólo de 86Km, sin embargo, ¡tardamos más de 5 horas en recorrelos!

Por fin llegamos a la que será nuestra casa durante las próximas dos semanas: un hostel humilde pero confortable a unos 30 metros de la casa de acogida.

En la puerta, un grupo de niños, jóvenes y adultos nos esperan con collares de flores y sonrisas.

Por la noche visitamos por primera vez la casa de acogida de Hetauda (primera vez para Elba y para mí). Los niños y niñas se acercan a saludarnos llenos de entusiasmo, nos preguntan nuestros nombres en un inglés bastante bueno y empezamos a conocerlos. Después nos vamos a la cocina y allí nos aguarda una sabrosa cena nepalí.

Después de cenar subimos a la sala donde están los niños y niñas. Tienen muchas ganas de jugar y charlar con nosotros, improvisamos un «ninja» ó un «toma tomate» (el cual ya conocían). Con un cúmulo de sensaciones positivas y muchos «subha ratri» (buenas noches en nepalí), nos vamos a descansar.

Hoy nos levantamos temprano, cogemos un motocarro donde nos subimos los 5 y nos vamos al centro de Hetauda, después de una reunión para ultimar los detalles de las actividades que haremos estos días, nos vamos a comprar algún material que falta para los talleres.

Por la tarde, nos vamos con los niños y niñas a un campito donde pacen un par de vacas sagradas. Cantamos «make tume papa» y nos lo pasamos en grande jugando al catapum chis pum, el fútbol chino ó el pañuelo.

Después de cenar, nos juntamos en la sala con los niños y niñas y nos enseñan un canción y baile nepalí. Nosotras les enseñamos el Chipi chipi, con el que se parten de risa y se van cantándolo para cama.

Presentación

Empezamos este Blog con ganas de contar lo que estamos viviendo en Nepal.

Somos Pedro y Elba, Animador sociocultural y Bióloga respectivamente entre otras muchas cosas.

¿Qué nos trae a Nepal? Podrían ser sus antiguos templos ó sus gigantescas montañas… ¡Pero no! Tiene nombre propio: Se llama Zalo y es el tío de Elba.

Obviamente, no es expresamente a Gonzalo a quien venimos a ver, para eso bastaría con acercarse un día por Labañou (A Coruña). Pero sí fue su propuesta de hace unos meses la que hizo que nos decidiéramos a viajar hasta el continente asiático: Colaborar con la ONG Camina Nepal en una casa de acogida, proponiendo y llevando a cabo actividades lúdicas para acompañar a los niños y niñas durante sus vacaciones.

Cabe decir que nuestro mundo gira entorno a los niños/as ya que trabajamos como monitores/educadores de manera habitual con ellos/as.

Pasamos los primeros días de aclimatación en la caótica y exhuberante Kathmandú. Nos alojamos en la casa de Creative Nepal, una residencia en la que la ONG colabora para darles un futuro a los jóvenes después de la casa de acogida. Aquí conocimos a gente maravillosa como Netra, Yodis y Kalpana, los 3 chicos que están directamente gestionando este espacio. Su hospitalidad ha sido increíble desde que nos recogieron en el aeropuerto poniéndonos un pañuelo en el cuello y dándonos un caluroso abrazo.

Durante estos días, coincidimos en la casa con otras personas que llegaron desde España y que forman parte de la ONG Aba Nepal, la cual ayuda también a que este lugar pueda existir. Con ellos visitamos un orfanato al cual ayudan desde hace muchos años y en el que van a pintar con los niños un mandala gigante sobre una pared del edificio como actividad artística de este año.

Además de Zalo, llegan a la casa Noemí y Bárbara, integrantes de la ONG Camina Nepal y con las cuales compartiremos nuestra experiencia en en el refugio infantil de Hetauda.